Balance minero del 2011

¿Cómo se podría definir la actividad minera en el Perú durante el 2011? Muy buena, buena o regular. Me atrevería a decir que buena. Si consideramos que los primeros seis meses del año fueron todavía bajo el mandato presidencial de Alan García, la cosa estaba como bajo “piloto automático”. Con excepción de los casos Doe Run Perú y Tía María, el suelo estaba parejo.

Lo de Doe Run Perú ya sabemos que es un tema donde no solo se manejan temas financieros, societarios y legales, sino también medioambientales que al parecer son los más graves de solucionar. Durante su reciente visita a Junín, el presidente Humala ha prometido dar solución al conflicto. Ojalá que lo consiga, por el bien de la comunidad y la buena marcha de la economía.

En el caso de Tía María, yacimiento cuprífero en el que Southern Perú tiene sus operaciones, el diálogo está pendiente y según lo expresado por fuentes de la Presidencia del Consejo de Ministros, se está a la espera de resolver el tema del proyecto Conga, en Cajamarca, para entrar a negociar en Tía María.

Ya con Humala en el gobierno, parecía que los conflictos mineros habían quedado en stand by, pero a comienzos de noviembre empezaron los paros, los bloqueos de carreteras, el diálogo entre las partes involucradas, luego la radicalización de la medida de fuerza, el estado de emergencia en Cajamarca y la consiguiente renuncia del ex premier Salomón Lerner. Ahora se ha retomado el diálogo con el premier Oscar Valdés, se hará un peritaje internacional del estudio de impacto ambiental y se espera que el proyecto se retome.

Durante los últimos diez años, la economía peruana creció un promedio de 6,3% anual, logrado una clase media emergente. Las perspectivas de la inversión minera en el Perú bordean los 50 mil millones de dólares hasta el 2016, en una economía con un PBI que bordea los 168 mil millones de dólares. Nada mal para un país que se mueve en una región con economías poco boyantes y en constantes conflictos políticos.

Por todo ello, el 2012 se abre como un año que ofrece muy buenas oportunidades por desarrollar, grandes proyectos nacen en medio de una situación favorable que debe ser propiciada por el gobierno, en aras de seguir con el crecimiento económico anhelado por todos. 

Andrés Sánchez Alayo

Que siga el diálogo por Conga

El diálogo se impone en Conga, los principales representantes de la región Cajamarca y del gobierno muestran una buena disposición a sentarse en una mesa de trabajo y negociar las mejores condiciones para sacar adelante el proyecto, pero no faltan los que se han quedado sin piso e intentan maniobras desesperadas para recobrar el protagonismo.

Se trata de Gregorio Santos, el presidente regional que se negó a participar del cónclave del día 27, que no estuvo para la foto luego de la reunión que duró más de tres horas, y que ahora intenta declarar zonas intangibles las lagunas en cuestión. El gobierno ha reaccionado de inmediato declarando que se trata de una medida inconstitucional y que no le compete a la autoridad regional.

Además, un grupo de organizaciones no gubernamentales presentó una medida cautelar ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, con la finalidad que se levante el estado de emergencia en las zonas en conflicto, a lo que el procurador del Estado, Luis Alberto Salgado, ha respondido informando a la CIDH que el estado se emergencia ya ha sido levantado.

Pero como si esto no fuera suficiente, los frentes de defensa con claros intereses políticos y sin un mínimo de consideración por la comunidad cajamarquina, han anunciado un paro para los días 2 y 3 de enero con la finalidad de entorpecer el diálogo que empezaba a ser fructífero entre ambas partes.

Con esta decisión lo más probable es que el gobierno adopte medidas preventivas a fin de evitar bloqueos de carreteras y violencia en las calles cajamarquinas, sin contar los graves problemas sociales y económicos que este tipo de acciones generan en la comunidad.

Esperamos que las acciones del gobierno sean inmediatas más aun para favorecer el diálogo que ya se había iniciado en Lima entre el gobierno y 42 autoridades de la región Cajamarca, quienes apuestan por la normalización de las actividades en el proyecto minero Conga.

Andrés Sánchez Alayo

Proyectos mineros en cartera

Ahora que culmina el 2011, es  bueno hacer un recuento de los proyectos mineros que se encuentran pendientes de ejecución en el país, y que significan una importante fuente de ingresos tanto para la economía como para la tributación.

Se calcula que en estos momentos existen siete importantes proyectos mineros, incluyendo a Conga, por ejecutarse entre los años 2011-2016 y que representan una inversión total de 11 mil millones de dólares.

El primero que puedo mencionar es Conga, en Cajamarca, a cargo de la Minera Yanacocha. Como se sabe aquí la inversión es de 4,800 millones de dólares y se espera que luego del diálogo propiciado en Lima por la Presidencia del Consejo de Ministros, y con el peritaje internacional del estudio de impacto ambiental, siga adelante sin mayores inconvenientes.

El segundo proyecto importante es Tía María, en Arequipa, con una inversión aproximada de mil millones de dólares. Aquí está pendiente el diálogo con las comunidades involucradas, el cual se retomará una vez se concluya con la resolución del conflicto en Conga.

El tercer proyecto en agenda es Río Blanco, en Piura, con una inversión que supera los 1,500 millones de dólares. El cuarto proyecto es Santa Ana, en Puno, con una inversión que bordea los 51 millones de dólares.

El quinto proyecto es Galeno, en Cajamarca, que incluye una inversión superior a los 2,500 millones de dólares; el sexto proyecto es Corani, en Puno, con 674 millones de dólares de inversión; y el sétimo proyecto es Michiquillay, en Cajamarca, con una inversión superior a los 700 millones de dólares.

Andrés Sánchez Alayo

Por fin aprobaron términos del peritaje internacional de Conga

Luego de más de tres horas de diálogo, en una jornada calificada como histórica, representantes del gobierno y cerca de 42 personalidades de la región Cajamarca, aprobaron los términos de referencia para el peritaje internacional del estudio de impacto ambiental del proyecto minero Conga.

El presidente del Consejo de Ministros, Oscar Valdés felicitó a los representantes de Cajamarca, entre los que se encontraban alcaldes, comuneros, ronderos, empresarios, transportistas, entre otros, porque se ha dado un ejemplo al país de cómo se debe dialogar dejando de lado temas políticos y pensando en el crecimiento económico y la eliminación de la pobreza.

En el acuerdo consensuado se precisa que el peritaje internacional será íntegramente sufragado por el Estado y realizado por una entidad con una experiencia profesional mínima de 15 años en un plazo no mayor de 40 días calendario.

El objetivo general del peritaje es identificar y proponer las medidas que permitan el mejoramiento de las acciones de mitigación de los impactos ambientales del proyecto minero. El alcance del peritaje abarca el área de influencia del proyecto Conga en donde se encuentran las cuencas y microcuencas.

Uno de sus objetivos específicos es conseguir alternativas que permitan una mayor disponibilidad de agua para las microcuencas ubicadas en la provincia de Celendín, distritos de Huasmín y Sorochuco; y Cajamarca, distrito de La Encañada, el en área de referencia del mencionado proyecto.

Este primer acuerdo a favor del proyecto Conga, significa un excelente primer paso para solucionar el conflicto minero, cuya paralización ha afectado hasta el momento a 60 mil pobladores, y tiene paralizadas a empresas proveedoras de 160 camiones y 500 unidades de maquinaria pesada.

Andrés Sánchez Alayo

Gobierno y autoridades regionales de Cajamarca se reúnen en Lima

Todo quedó listo para la reunión de mañana martes 27 entre los representantes del Estado, que tendrán como vocero al ministro del Ambiente, Manuel Pulgar Vidal, y los representantes de la Región Cajamarca, para llegar a un acuerdo satisfactorio con la finalidad de desarrollar el proyecto minero Conga.

La Presidencia del Consejo de Ministros cursó las respectivas invitaciones a las autoridades legítimamente elegidas, como los alcaldes distritales y provinciales, los colegios profesionales y la cámara de comercio. El premier Oscar Valdés no ha cursado invitación a Wilfredo Saavedra, por no ser considerado como “un interlocutor válido”. El presidente regional Gregorio Santos anunció a último momento que no asistiría al cónclave.

Valdés reconoce que el pueblo de Cajamarca quiere que se esclarezcan las dudas que existen actualmente acerca de la viabilidad del proyecto Conga, por ello requiere de autoridades que fomenten el diálogo y no de personas que representan intereses políticos y que lo único que buscan es el caos y la intolerancia.

Existe una gran expectativa sobre la forma y el fondo en la reanudación del diálogo minero. Sobre la forma se podría decir que ya es un gran avance el hecho que las autoridades de Cajamarca aceptaran venir a Lima para llegar a un acuerdo. Y sobre el fondo, habría que precisar que si se llega a un acuerdo positivo este será un buen precedente para la solución de futuros conflictos mineros.

Vistas las cosas de esta manera, y sin los obstáculos que se presentaron en la primera etapa de las negociaciones, se espera obtener resultados satisfactorios en este primer encuentro en Lima que busca dar solución a un conflicto que no favorece en nada el proceso de inversiones mineras en el país.

Y si a esto sumamos el hecho de que el Ejecutivo cuenta ya con la delegación de facultades por 120 días para legislar en materia de minería informal, tenemos que el camino se allana para convertir a la minería peruana en una actividad moderna, productiva y con futuro.

Andrés Sánchez Alayo

El martes 27 se reanuda el diálogo en Cajamarca

El gobierno decidirá el próximo martes 27 de diciembre aspectos fundamentales para seguir adelante con el proyecto Conga, en la región Cajamarca, como ya se ha dicho el más importante emporio minero del país que generaría recursos por 4,800 millones de dólares.

Para esta segunda parte de las negociaciones, se ha decidido que el ministro del Ambiente, Manuel Pulgar Vidal, abogado de profesión y conocedor a fondo del tema medioambiental, sea quien lidere el diálogo con las autoridades regionales cajamarquinas.

La misión estará encabezada por Pulgar Vidal, pero también contará con la participación de los ministerios de Agricultura, Energía y Minas, y de la Presidencia del Consejo de Ministros. Se trata de una comisión multisectorial que va con las mejores intenciones de resolver el conflicto lo antes posible, teniendo en cuenta las pérdidas diarias producidas por la paralización del proyecto.

Lo que se debe aprobar ahora es a la entidad internacional encargada de realizar un peritaje sobre el Estudio de Impacto Ambiental que fuera aprobado durante el anterior gobierno y que al parecer requiere de algunos ajustes con la finalidad de adaptarlo a la realidad social y medioambiental de las comunidades involucradas.

Se espera también que para esta oportunidad se mejore el nivel del diálogo, pues las objeciones a la participación del premier Oscar Valdés se han superado al otorgar la responsabilidad de interlocutor válido al ministro Pulgar Vidal, quien es un profesional con amplia experiencia, también, en resolución de conflictos.

Lo que el gobierno también espera es que de parte de las autoridades regionales cajamarquinas también se presenten interlocutores válidos y propensos al diálogo y la mediación, y no personajes como Wilfredo Saavedra que lo único que buscan es obstaculizar las negociaciones y profundizar el conflicto social.

Andrés Sánchez Alayo

El Estado y su responsabilidad en la actividad minera

Ahora que el tema Conga ha movilizado a toda una región protestando por el impacto medioambiental del proyecto minero, muchos especialistas han caído en cuenta de que es necesario que el Estado peruano adopte políticas fiscalizadoras para la explotación de los yacimientos mineros, en especial la minería de tajo abierto.

Estos mismos especialistas coinciden en señalar que todo esto no ocurriría si es que el Estado observara una actitud mucho más vigilante y protectora del medio ambiente al momento de dar luz verde a un proyecto minero en nuestro país. Al parecer, muchos proyectos son aprobados sin un estudio de impacto ambiental o en todo caso con el EIA aun sin concluir.

En el caso de Cajamarca y Yanacocha ahora se reconoce que desde hace más de 12 años que opera la minera en la región, no se ha cumplido regularmente con la protección del medio ambiente lo que convirtió al proyecto Conga en el detonante de un reclamo que tenía los días contados para estallar.

Cuando se hacen comparaciones con otros países mineros, como Canadá, Australia o Nueva Zelanda, se afirma que en estos países no ocurren conflictos mineros porque las empresas operan una vez resueltos todos los aspectos contractuales y medioambientales. Lo mismo podría ocurrir en el Perú si se siguen las reglas del juego con prolijidad.

Pero pienso que aquí no solamente es responsabilidad del Estado sino también de la Sociedad Nacional de Minería y Petróleo que, pese a ser parte interesada porque es la entidad que agrupa a las compañías mineras y petroleras, debería preocuparse porque la actividad minera se desarrolle sin ningún tipo de restricción.

Por ahora confiemos que con la experiencia de Conga, y todos los inconvenientes ocasionados, que incluyen bloqueos de carreteras, violencia social y pérdidas millonarias para la actividad minera, el gobierno reflexione y analice la situación con la finalidad de adoptar medidas que garanticen el normal funcionamiento de la minería en el país.

Andrés Sánchez Alayo

La intransigencia en el diálogo de Conga

Cuando todo indicaba que el diálogo tomaba un rumbo favorable para las partes involucradas en el proyecto Conga, las autoridades regionales de Cajamarca patearon el tablero y el diálogo propuesto por el gobierno, encabezado por el premier Oscar Valdés, parece por ahora no tener salida.

Si hasta el ex presidente Alan García se había pronunciado acerca del conflicto y felicitó al gobierno por la forma como venía manejando el conflicto, sin que esto implique tomar una posición favorable a la minera Yanacocha y más exigiendo el peritaje internacional lo antes posible.

Monseñor Luis Bambarén también se ha pronunciado al respecto, dejando en claro que se ofrece como mediador con la finalidad de lograr solucionar el conflicto, demostrando de esta manera que se trata de un problema social, medioambiental, en el cual poco o nada tiene que hacer la política.

Si bien es cierto que el diálogo es por ahora tenso y cortado por momentos, no se han generado hechos de violencia y se espera que pronto se sienten nuevamente a dialogar demostrando de esta manera el interés por llevar adelante este importante proyecto minero que favorecerá el desarrollo del país.

Por su parte, el premier Valdés ha pedido a las autoridades regionales cajamarquinas estar presente en Lima el próximo 27 de diciembre con la finalidad de aprobar a la entidad internacional que se encargará de revisar el estudio de impacto ambiental y que lo someterá a un peritaje.

De esta manera, se empieza a perfilar un mejor panorama para el diálogo en Cajamarca y esperamos que se deje a atrás la intransigencia que tanto daño hace a la conciliación y el acuerdo nacional para sacar adelante el proyecto Conga.

Andrés Sánchez Alayo

Las encuestas y la minería

Una reciente encuesta de la consultora Ipsos Apoyo, por encargo del diario El Comercio, registra que el 42% de los peruanos considera que el proyecto Conga debe continuar, pero con algunos ajustes como el peritaje internacional y un nuevo estudio de impacto ambiental.

Aunque ya sabemos que una encuesta es la expresión de tan solo una muestra estadística de la población, como siempre sus resultados expresan el sentir de la gente, tal como ocurre en las elecciones municipales y presidenciales; su margen de error es mínimo y sus cifras quedan confirmadas con los resultados obtenidos al final.

Lo que a esta encuesta le ha faltado preguntar es acerca de si la gente está de acuerdo con los bloqueos de carreteras como una manera de presionar al gobierno para solucionar los conflictos. De seguro que un gran porcentaje de la población se manifestaría en desacuerdo, porque son justamente estos hechos de violencia los que obstaculizan el diálogo.

Otra pregunta necesaria que al parecer no considera la encuesta, es sobre si la protesta es antiminera y a favor del medio ambiente, o es que obedece simplemente a intereses políticos promovidos por sectores radicales. Ahí también la opinión pública se inclinaría hacia la segunda opción.

Esta encuesta coincide con la reanudación del diálogo en Cajamarca por parte del primer ministro, Oscar Valdés y las autoridades regionales. En este primer round, el presidente regional de Cajamarca, Gregorio Santos, se ha negado a firmar el acta de conciliación, mientras que el premier Valdés afirma que el gobierno seguirá intentando el diálogo.

Asimismo, Valdés ha confirmado que el Banco Mundial no será la entidad encargada del peritaje internacional, por ser una institución financiera con intereses conocidos en las inversiones que se hacen en el país, y que el proyecto debe reanudarse lo antes posible porque se está perdiendo diariamente 2 millones de dólares. Esperemos que así sea.

Andrés Sánchez Alayo

Un marco jurídico para la minería informal

El Congreso de la República le ha concedido facultades extraordinarias al Poder Ejecutivo para que pueda legislar sobre la minería informal. Ahora se entiende porque se ha retrocedido en la intervención a los campamentos informales de Madre de Dios, luego del operativo de las fuerzas combinadas de la Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.

Con lo ocurrido en Cajamarca, y teniendo en cuenta que se vienen otros conflictos sociales más vinculados a la minería, también ahora entiendo porque el banco de inversión estadounidense Merril Lynch, considera que el crecimiento económico del Perú será menor en los próximos años.

Asimismo, un reciente informe de la Agencia Peruana de Cooperación Internacional, estima que para el próximo año la cooperación internacional disminuirá especialmente para los temas medioambientales. Tanto USAID Perú como la GIZ alemana destinarán menos fondos para la conservación de la selva peruana, y ahora entiendo por qué.

Y no se trata de ser alarmistas ni de fomentar el pánico dentro de la sociedad, pero mientras tenemos claros ejemplos de esfuerzo y trabajo con la finalidad de optimizar las cifras macroeconómicas del país, otros propician situaciones de conflicto y caos que no benefician en nada al desarrollo nacional.

El ministro de Energía y Minas, Jorge Merino, se ha sumado a esta preocupación de agentes internacionales que observan con preocupación lo que pueda ocurrir en el Perú si es que no se aplican medidas correctivas que eviten frenar el crecimiento económico del país en los próximos años.

Por su importancia como una actividad productiva que contribuye enormemente al producto bruto interno, debemos pronunciarnos positivamente a favor de una minería moderna, eficiente y responsable que siga convirtiéndose en el motor del desarrollo nacional.

Andrés Sánchez Alayo

El aporte voluntario de la minería

Mucho se habla de los aspectos negativos de la minería, de ser un agente contaminante del medio ambiente, de no querer pagar ciertos impuestos a los que sí está obligada a cumplir, a su poca o escasa contribución al alivio de la pobreza extrema en el país, entre otros aspectos poco afortunados.

Sin embargo, lo que muchas veces se deja de mencionar o en todo caso se olvida mencionar es el aporte voluntario que realiza al país, sin mediar ningún tipo de condicionamiento o excusa. Los mineros se meten la mano al bolsillo y hacen una gran obra en el país que no es destacada como debiera.

A comienzos de año, la Sociedad Nacional de Minería y Petróleo, hacía un estimado sobre su aporte voluntario a la economía peruana calculándolo en más de 500 millones de soles. Una  cifra que ha permitido hacer una labor social que muchas veces no es noticia, pero que merece ser resaltada de vez en cuando.

Según fuentes de la SNMPE, estas transferencias se empezaron a realizar a partir de mayo, mes en que las mineras hacen sus balances de producción del año anterior. Los 500 millones de soles que se aportarán este año harán un total de 1,778 millones de soles que los mineros han aportado en los últimos cuatro años.

La pregunta fundamental es: ¿en qué se ha invertido este dinero? Pues fundamentalmente en programas de alimentación para evitar la desnutrición en niños que se encuentran en situación de pobreza extrema, en la construcción de postas médicas y policlínicos con la finalidad de dar una mejor atención en salud pública, en sustentar los sueldos de profesionales de la salud para implementar estos establecimientos, entre otros programas.

Sin duda, esta debería ser una noticia digna de destacarse y no solo las referentes a paros y bloqueos en las carreteras. La minería tiene todavía algunos conflictos externos e internos por solucionar, pero es un motor del desarrollo que no debe detenerse.

Andrés Sánchez Alayo

Vuelve el diálogo en Conga

Cuando todo parecía perdido en relación al proyecto Conga, en Cajamarca, las aguas parecen volver a su nivel luego que el presidente regional Gregorio Santos, anunciara el levantamiento del paro para que a su vez el gobierno deje sin efecto el estado de emergencia en la región y se reinicie el diálogo.

El gobierno ha formado una comisión encabezada por el ministro de Vivienda, René Cornejo, quien se ha reunido ya con representantes de la región junto a la ministra de Inclusión Social, Carolina Trivelli, y el ministro del Ambiente, Manuel Pulgar Vidal. Los resultados hasta el momento han sido auspiciosos y se espera el nuevo estudio de impacto ambiental y la opinión de una entidad internacional.

La compañía minera Yanacocha ha reconocido que hasta el momento se habían invertido más de 600 millones de dólares en el proyecto Conga. Esto nos lleva a pensar que de aprobarse el EIA y con el visto bueno de la entidad internacional, de inmediato se proseguirá con el proyecto que se estima logrará una cifra record en la explotación aurífera del Perú: 4,800 millones de dólares.

Al final se ha logrado en gran parte lo que quería el gobierno, es decir dialogar pero sin condicionamientos y sin violencia en las calles. Los pobladores de Cajamarca han reconocido que con tomas de carreteras y bloqueos no se puede dialogar y mucho menos para conciliar en un tema tan vital para el desarrollo nacional como el proyecto Conga.

Se puede decir entonces que las condiciones para el diálogo son propicias, solo resta que el gobierno levante el estado de emergencia porque no solamente afecta el diálogo sino también actividades importantes en la región como el turismo, que por estos días ha sido perjudicado tanto por el paro regional como por el estado de emergencia.

Ojalá que pronto veamos resultados positivos, que Cajamarca retome el camino de la actividad minera próspera y responsable, y que se genere la confianza necesaria para que el 2012 sea un año de crecimiento y desarrollo.

Andrés Sánchez Alayo

Conga y la crisis ministerial

Por años, los conflictos sociales, provocados ahora en su mayoría por reclamos a las compañías mineras, han dejado sin piso a muchos gobiernos motivando crisis que terminan con la renuncia del gabinete en pleno. Lo ocurrido con el proyecto Conga y el gabinete Lerner constituyen una prueba fehaciente de ello.

Sin embargo, a la luz de los recientes acontecimientos, ahora se entienden muchas cosas en relación al manejo de la crisis en Conga. En primer lugar, el conflicto minero se estaba enfrentando con un doble discurso. Por un lado, el diálogo propiciado por el ex premier Salomón Lerner, y por el otro, la intención de recuperar el orden lo antes posible por parte del ministro Valdés, ahora premier.

En segundo lugar, la postura de Lerner obviamente representaba la posición pro empresarial, pro inversión privada, mientras que la posición de Valdés era pro gobierno buscando no ceder ni un milímetro. El resultado final fue el mensaje a la nación del presidente Humala anunciando el estado de emergencia en Cajamarca.

En tercer lugar, la motivación eminentemente política de la paralización en Cajamarca demuestra que aunque se hubiera sustentado con documentos oficiales de organizaciones medioambientalistas de reconocido prestigio, de que el proyecto Conga no contaminaría el agua de las lagunas involucradas en el proyecto, igual se hubiera seguido adelante con la protesta porque, en este tema, la política se anteponía al tema ambiental.

Y, en cuarto lugar, dentro del gabinete existían demasiadas voces discrepantes en torno al tema Conga. Mientras que algunos, al igual que el presidente Humala decían: agua y oro sí es posible, otros manifestaban abiertamente que Conga no iba. Esto a pesar de que el ex premier Lerner había manifestado meses antes que los ministros no podían expresar libremente opiniones políticas, sin antes coordinar con la PCM.

Finalmente, ahora se habla de una nueva negociación para sacar adelante el proyecto Conga, a cargo del ministro de Vivienda, René Cornejo, donde se invocará la participación de una institución internacional para definir el Estudio de Impacto Ambiental. Esperamos que esta vez se concrete positivamente y que el proyecto se pueda cristalizar por el bien de la economía peruana.

Andrés Sánchez Alayo

Newmont defiende su posición en Cajamarca

Cuando existe un tema en disputa, tan importante como resulta la actividad minera para el país, siempre es bueno escuchar los testimonios de las dos partes interesadas. En el caso Cajamarca y Conga, la opinión de los pobladores, de las autoridades regionales y de las organizaciones medioambientales se ha escuchado lo suficiente, aunque falta oír lo que dice Newmont.

Un cable de Reuters resume con claridad la posición de Newmont, la segunda productora de oro en el mundo y propietaria de la Minera Yanacocha. El presidente ejecutivo de la minera estadounidense, Richard O´Brien, afirma que tanto el Estudio de Impacto Ambiental, como la construcción de reservorios de agua que reemplacen las lagunas, como los demás aspectos relacionados con la responsabilidad social de la empresa, estaban debidamente aprobados.

O´Brien reconoce que el EIA fue aprobado en octubre del 2010 y que antes de su aprobación fue revisado por 12 agencias. Además, todos los estudios de impacto social fueron revisados desde hace 13 años, considerando que Yanacocha tiene proyectado seguir trabajando en Cajamarca por lo menos en los próximos 20 años en proyectos que se estima bordean los 30 mil millones de dólares.

Respecto al plan para proteger el agua de Conga, estimó que se trataba de construir cuatro reservorios con capacidad para almacenar agua por el doble de la capacidad de las lagunas afectadas, que, como ya se ha comprobado, tenían agua no apta para el consumo humano.

Ahora Cajamarca se encuentra en estado de emergencia. El gobierno central ha debido tomar medidas extremas para controlar la situación en la región, al punto de haber “congelado” sus cuentas bancarias e investigar al presidente regional Gregorio Santos, luego de haberse detenido y posteriormente liberado al presidente del frente medioambiental de Cajamarca, Wilfredo Saavedra.

En las próximas semanas deberá resolverse esta álgida situación en la que ambas partes interesadas tienen puntos de vista muy divergentes. Se impone una mesa de diálogo en la que se vuelvan a sentar con ánimo conciliador y bajo las condiciones de seguridad y tranquilidad requeridas.

Andrés Sánchez Alayo

Los impuestos y la minería

Como para dejar sin piso a los que reclaman que la minería es una actividad absolutamente nociva para el medio ambiente y la economía, y que además no aporta ningún beneficio al país, habría que subrayarles estas dos informaciones aparecidas recientemente en medios locales.

La primera tiene que ver con los tributos recaudados en el primer mes (octubre) de la aplicación del nuevo marco tributario a la minería. Según cifras de Sunat, se han obtenido 209 millones de soles que se dividen en 61 millones de la nueva regalía minera, 52 millones por el impuesto especial a la minería, y 92 millones por el gravamen especial minero.

Cabe aclarar que estos tres impuestos son adicionales al aporte que el sector minero hace por concepto de tributos internos, por lo que este año este importante sector productivo viene aportando en promedio el 18 por ciento de los tributos internos, y si se considera solamente el impuesto a la renta la cifra se eleva a 34 por ciento.

La segunda información está relacionada con las declaraciones del presidente de la región Apurímac, Elías Segovia, quien afirma que “agua y minería pueden ir de la mano, si se trabaja en el cuidado del recurso hídrico y con una explotación adecuada de la riqueza”.

Segovia manifiesta que la Zonificación Económica Ecológica constituye un instrumento fundamental para el desarrollo regional, pero debe establecer no solo mecanismo de protección y conservación sino también de explotación de los recursos.

Estos dos temas deben hacernos reflexionar sobre lo que significa trabajar con una minería moderna, responsable con el medio ambiente y comprometida con el desarrollo de las comunidades involucradas y del país.

Andrés Sánchez Alayo

La minería no debería generar conflictos sociales

Para quienes piensan que la minería solamente genera conflictos sociales en el Perú, habría que recordarles que en Nueva Zelanda, Australia o Canadá, donde la minería es un fuerte componente de sus economías, existen también conflictos, pero que son resueltos pacíficamente por la vía de la negociación entre las partes involucradas.

En el Perú, lamentablemente se quiere llevar las cosas al extremo. Organizaciones con financiamiento internacional intervienen promoviendo intereses particulares, cual perro del hortelano. ¿Será acaso que al no poder invertir en la actividad minera pretenden impedir la participación de capital extranjero que sí se encuentra expedito para hacerlo? Esta es una pregunta que merece una respuesta inmediata.

La Presidencia del Consejo de Ministros, a través de su Oficina de Gestión de Conflictos Sociales, ha divulgado los nombres de las comunidades que se encuentran en las zonas de influencia y que están de acuerdo con las actividades mineras en sus regiones. No se entiende entonces de dónde provienen las protestas, quiénes instigan a la población a hacer paros en contra de la inversión privada que genera bienestar.

Lo peor de todo radica en que pese a existir mesas de diálogo, en las que se encuentran representados todos los que tienen que ver con el tema, incluyendo a la iglesia católica, algunos actores involucrados actúan de manera ambigua porque por un lado negocian la solución del conflicto y por el otro salen a las calles a protestar. Se trata de un doble discurso que perjudica el diálogo y dilata la resolución del conflicto.

Existen instituciones que por el simple hecho de estar inscritas en la Federación Minera, pero sin contar con un denuncio, se creen con derecho a movilizar a la población en una protesta que no tiene ningún sentido y que refleja solo una motivación política que no beneficia al desarrollo de la actividad minera en el país, que tanto lo requiere.

La conciliación es una herramienta que bien empleada se convierte en una alternativa para solucionar esta clase de conflictos. Se trata de una negociación en la que ambas partes deben ganar y obtener resultados positivos para su gestión.

Andrés Sánchez Alayo

Acuerdo Nacional para la Minería

No es una mala idea, hay que madurarla, pero ante la situación que enfrenta el gobierno en estos momentos tal parece que un acuerdo nacional para ponerse de acuerdo en qué regiones desarrollar proyectos mineros y en qué lugares no, puede ser una buena alternativa para resolver la crisis actual.

Esta es una propuesta hecha por el sociólogo Sinesio López, quien por su experiencia en gestiones públicas habla con autoridad y resume un sentir nacional: ponerse de acuerdo para beneficiar el desarrollo nacional. Para ello se requiere instalar una mesa de diálogo que nazca de una iniciativa pacífica y alturada.

Lo que ocurre en estos momentos en Cajamarca es la mejor prueba de que se requiere de un acuerdo nacional, a manera de un plebiscito, con la finalidad de llegar a un acuerdo definitivo y que todos los proyectos mineros que se concreten en el país trabajen sin trabas ni obstáculos de última hora.

En estos momentos se trata de culpar a Yanacocha por no tener antecedentes ejemplares en el respeto al medio ambiente, durante los 18 años que viene operando en Cajamarca. Pueden tener razón los que ahora se oponen a Conga, pero son errores que pueden subsanarse y estamos a tiempo de hacerlo.

La minería en países como Chile, Canadá, Australia y Nueva Zelanda transcurre sin mayores problemas ni conflictos con las comunidades involucradas. Lo mismo podría ocurrir en el Perú, y este no es un tema cultural sino más bien de un mejor establecimiento de las reglas del juego, empezando por un acuerdo entre los llamados stakeholders (comunidad, empresa y Estado-gobierno).

La propuesta está sobre la mesa. El gobierno del presidente Humala tiene en estos momentos la potestad de revisar contratos, mejorar las condiciones, optimizarlos, de la misma forma en que se aplicaron las regalías, los impuestos a las sobreganancias y la Ley de consulta previa. No se debe perder el tiempo y actuar lo antes posible por el bienestar de todo el país.

Andrés Sánchez Alayo

Paralización del Proyecto Conga

Yanacocha anunció paralización del Proyecto Conga a una semana de protestas por parte de la población cajamarquina, luego de varios heridos, pérdidas millonarias, renuncia de un viceministro, y violencia generalizada.

Mediante un comunicado, la minera ha manifestado que cumplirá con todos los requerimientos hechos por los ministerios del Ambiente y Energía y Minas para seguir adelante con el proyecto, ya que se ha solicitado un nuevo informe de impacto ambiental.

Esta es una decisión que se veía venir ya que después de casi una semana de protestas, la región Cajamarca no daba marcha atrás en sus pretensiones y la mesa de diálogo no reunía las condiciones de seguridad como para sentarse a negociar, al punto que el presidente Humala ni se animaba a viajar a la ciudad para llegar a un acuerdo definitivo.

La decisión de Yanacocha llega en un momento preciso porque ya se hablaba  de una probable militarización de la ciudad, con lo que la situación se volvería incontrolable y peor de lo que ya estaba.

Con esta medida, en mi opinión, el gobierno deberá iniciar un diálogo con la población y con la minera Yanacocha, en donde se resuelvan los principales puntos en conflicto, especialmente en lo que se refiere a la contaminación de los ríos y los efectos de su trabajo en los próximos años.

De esta forma también se espera que con un clima de paz y tranquilidad se pueda llegar a un acuerdo pacífico, pues se trata de un proyecto que significa desarrollo y productividad para una región que tanto lo requiere. Las cifras así lo demuestran.

Andrés Sánchez Alayo